EL CUENTO FANTÁSTICO

El cuento es un género discursivo literario en el que se narran una serie de hechos ficcionales creados por la imaginación de un autor. En ellos,  el lenguaje es trabajado con la finalidad artística de crear una atmósfera determinada y provocar un efecto. Por ello, determinar qué hechos se narrarán, quién lo hará y cómo es muy importante. De allí que el relato no es sólo una buena historia, sino también una manera especial de contarla.

Las acciones de los personajes transcurren en un espacio y en un tiempo determinados, que tendrán características propias, de acuerdo con la clase de hechos ficcionales que se cuenten (realistas, maravillosos, fantásticos, policiales etcétera).

LO FANTÁSTICO

Sabemos que la realidad que nos circunda tiene sus leyes, que siem­pre que llovió, paró y que todo lo que sube tiene que bajar... Sin embargo, ¿es nuestra realidad tal como la conocemos? ¿Las leyes de la física pueden darnos todas las respuestas para entender el espacio y el tiempo? ¿Estamos tan seguros de todo? Ver para creer, dice una antigua expresión. Pero ¿qué sucede cuan­do no podemos creer lo que vemos porque no tiene lógica o porque es imposible que las cosas sucedan de ese modo? Quizás haya una reali­dad oculta, algo que desconoce­mos... Otra cosa que, cada tanto, se deja ver. Se muestra, aparece, pero no la comprendemos y vacilamos frente a nuestra propia realidad.

Etimología: 
El término fantástico deriva del griego phantastikós que forma parte de la familia de palabras del verbo phantázein, 'volver a mostrarse'... Volver a mostrarse es volver a mirar. "Ver con la certeza de quien mira en las sombras, eso es la incertidumbre", dijo un poeta alguna vez. Sobre la posibilidad de lo incierto, trata este capítulo...

CONCEPTO:
      El relato fantástico es aquel que parte de elementos reales y cotidianos, pero, luego nos lleva en forma gradual o abrupta al ámbito de lo misterioso, sobrenatural e inexplicable; creando vacilación e incertidumbre en el lector. Éste no sabe si darle a la historia una explicación lógica o una sobrenatural. Porque, los límites entre lo racional y lo irracional, o entre la realidad y la fantasía, se ven alterados hasta el punto de quebrarse o desaparecer por completo. Y esa realidad que creíamos controlada cae por completo.

     
 Dijo Howard Phillips Lovecraft (1890-1937), un reconocido cuentista del género, nacido en los Estados Unidos: "Un cuento es fantástico simplemente si el lector experimenta, con profundidad un sentimiento de temor y terror, la presencia de mundos y poderes insólitos."

CARACTERES:

• El mundo aparece representado desde una perspectiva realista, fácilmente reconocible por el lector y sólido en apariencia. Cuando el hecho extraño se da cita, altera el orden de lo normal y se resquebraja la lógica convencional para dar paso a otra que transgrede lo esperable. Ejemplo: "Poco a poco empecé a sentir que me iba yendo, que algo de mí se mudaba hacia otro cuerpo…".
• Busca que el lector sea sacudido por la duda y la vacilación, que experimente una cierta inquietud al no poder inclinarse por una explicación racional o por una sobrenatural de los hechos; ya nada es lo que parece.  
• Produce el efecto fantástico, inquietud, incomodidad por no hallar  una respuesta tranquilizadora ante la ruptura de la normalidad.

Condiciones que debe cumplir el relato fantástico:

1. El texto debe presentar el mundo de los personajes como un mundo de personas reales. Por eso, frente al hecho fantástico el lector duda entre dar una explicación racional o sobrenatural de los hechos.
2. No sólo el lector debe vacilar, sino también algún personaje con el que el lector se identifique.
3. El lector de cuentos fantásticos deberá rechazar tanto la interpretación alegórica como la poética; es decir que debe creer que los hechos narrados, en el mundo presentado por la ficción, son posibles.

TEMAS:

     El cuento fantástico utiliza como punto de partida, los misterios del hombre y su mundo  que no han tenido una explicación clara y certera: el tiempo, el espacio, los sueños, las dimensiones, la muerte, la magia, los viajes en el tiempo y en el espacio, la transposición o fusión de mundos, la transmutación de sueño y realidad.

     El autor de estos relatos elige alguno de estos temas pero sin intención de resolverlos. Así, valiéndose de la ausencia de respuestas y de su imaginación logra crear incertidumbre en el lector.

Algunos temas del relato fantástico se repiten por ejemplo: 

•      El doble: en este caso los cuentos exploran la perturbadora sensación de no ser único, de tener un otro yo. Cuentos de Julio Cortázar, como "Lejana", se construyen sobre la base de este tema.

•       Alteraciones de la lógica espacial  y temporal: el tiempo y el espacio se ven alterados a través de regresiones, tiempos detenidos, realidades paralelas. "La trama celeste", de Adolfo Bioy Casares es un ejemplo de este tipo. 

•       Contaminación entre la realidad y el sueño ¿dónde termina la vigilia y empieza el sueño? ¿Cuál de los dos mundos es el verdadero y real? De esta vacilación surgen cuentos como el conocido "Las ruinas circulares", de Jorge Luis Borges.

•     Apariciones de fantasmas: la presencia de fantasmas o de seres sobrenaturales señalan el encuentro de dos mundos antagónicos, el de la vida y la muerte. Habría una realidad del más allá invisible que, de pronto, se deja ver. Gran parte de los cuentos de terror de Poe y de Lovecraft pertenecen a esta variante del género.

•     Mutaciones y transformaciones: en un momento dado, alguien se vuelve un ser totalmente distinto de lo que era. Historias con hombres lobo y vampiros entrarían en esta clasificación.

LOS PERSONAJES:

     Los personajes de los cuentos fantásticos, tanto en su aspecto exterior como en el interior, suelen ser presentados como seres comunes y corrien­tes. Se busca que el lector se reconozca en ellos y se sienta cómodo en un mundo que se parece al suyo. De este modo, los hechos fantásticos provo­can en el lector y en los personajes la misma perplejidad y desamparo.

     En algunos casos, poseen características sobrenaturales en función del tema del cuento, como los monstruos, los seres que mutan o los hombres con facultades excepcionales.

EL ESPACIO Y EL TIEMPO

     Para medir el tiempo, solemos recurrir a metáforas espaciales. Decimos el tiempo avanza o qué corto que fue el tiempo. Creemos que los días y las horas van hacia adelante, en el sentido de las agujas de un reloj y que no hay manera de volver hacia atrás o de detener el tiempo. Por otro lado, nuestra experiencia nos demuestra que es imposible estar en dos lugares a la vez, como también comprobamos que, en el momento de ir de un lugar a otro o de movernos en el espacio, también el tiempo se mueve.

     Las rupturas espacio-temporales son un tópico clásico de los cuentos fantásticos. Esto significa que estar aquí y allá en el mismo instante, avanzar y retroceder, o detener el tiempo son hechos posibles dentro de esa lógica fantastica.